Argentina presiona a mineros de criptomonedas en medio de una escasez energética

BitPatagonia, una de las compañías registradas de minería de cripto más grande de Argentina, recibió recientemente un aumento de 400% en su tarifa eléctrica como resultado de un cambio regulatorio dirigido específicamente a empresas mineras ubicadas en esa provincia, dijo a CoinDesk Pablo Holmes, director Industrial de la firma.

BitPatagonia está basada en Tierra del Fuego, la provincia situada al extremo sur de Argentina en la que están instaladas más de 22 empresas mineras de criptomonedas, según explicaron fuentes locales a CoinDesk. El gobierno, en desacuerdo con el consumo de energía de este tipo de compañías, impuso un aumento de 170% en la tarifa eléctrica mayorista en Tierra del Fuego.

Read this article in English.

El gobierno nacional, alertado por la creciente actividad minera de cripto, inició en enero un proceso de investigación para la identificación de empresas de minería y medición del consumo de energía. El objetivo, dijo en ese momento, era que los mineros “afronten el pago del precio de la energía equivalente al costo de abastecimiento, siendo inequitativo que abonen el precio de un usuario residencial”.

En Argentina, el gobierno otorga grandes subsidios a diferentes entidades proveedoras de electricidad y gas, lo que reduce la tarifa de estos servicios para los usuarios finales. En febrero de 2022 el presupuesto interanual destinado al subsidio energético aumentó 207% en comparación con el del año anterior, según un informe publicado por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).

El país, al mismo tiempo, se está quedando sin dólares para continuar importando energía ya que sus reservas promediaron US$38.500 millones en marzo, según el Banco Central argentino. Las reservas netas son de US$1.650 millones y las líquidas, negativas por US$1.900 millones, según un informe reciente de la firma local de inversiones Allaria

Los subsidios a la energía son una gran oportunidad para los mineros residenciales pero no para las mineras registradas, las cuales deben pagar tarifas industriales. Al referirse a esta situación, Holmes afirmó que no cree que las medidas gubernamentales de control vayan a favorecer el blanqueo de empresas y residentes que ejercen la minería cripto por afuera del radar del organismo recaudador, AFIP.

“Nadie va a salir a decir que está minando ilegalmente en los parques industriales, oficinas o casas solo por recibir la carta de un organismo público. Es como responder a una carta del Banco Central preguntando si este domicilio funciona como una cueva (casa de cambio ilegal) de compraventa de dólares. De todas maneras, entendemos que los funcionarios hacen sus mayores esfuerzos”, dijo Holmes.

Moisés Sorloza, secretario de Energía de Tierra del Fuego, dijo recientemente que el gobierno provincial relevó las granjas habilitadas para la minería pero advirtió que existen “micro mineras” no registradas que funcionan en hogares y deben ser reguladas a nivel nacional.

El funcionario agregó que el sistema eléctrico de Tierra del Fuego es “obsoleto” y que “de ninguna manera puede sostener la escalada de emprendimientos de alto consumo de energía”.

Por los aumentos tarifarios y la competencia desleal entre mineros registrados e ilegales, BitPatagonia explora la idea de dejar Argentina para instalarse en otros países, dijo Holmes, sin especificar una locación específica.

Santiago Miranda, CEO de CriptoLab, una empresa minera de cripto registrada en la provincia de Córdoba, dijo que, aunque la firma paga la tarifa eléctrica total, la actividad igualmente sigue siendo “muy rentable”.

En cuanto a la minería ilegal y los intentos regulatorios, Miranda advirtió que “nadie va a brindar información a menos que haya algún beneficio para el contribuyente”, y agregó que desde la empresa están trabajando con diferentes gobiernos provinciales para intentar redactar un “marco amigable y no solamente recaudatorio”.

Precios bajos, costos altos

Según un análisis de la organización de chequeo de datos Chequeado, el consumo mensual de 300 kWh cuesta US$5 en promedio en Buenos Aires, mientras que en los Estados Unidos el mismo consumo promedia $30.

Ese diferencia lleva a muchos argentinos a minar criptomonedas para generar un ingreso en moneda extranjera en medio de constantes devaluaciones del peso argentino y una inflación interanual que excede el 58%.

Sin estar registrados como mineros, Manuel y Pedro, quienes solicitaron resguardar en el anonimato sus apellidos, son amigos y empresarios que hace cinco meses invirtieron US$16.000 para minar ether en una oficina en el centro de la Ciudad de Buenos Aires.

“Con un día de minado cubrimos el excedente que llega en la tarifa eléctrica por la actividad”, aseguraron, y detallaron que reciben ingresos de US$30 diarios.

Los mineros consultados aseguraron que no están demasiado preocupados por las posibles restricciones e impuestos, ya que “la regulación irá corriendo detrás de la tecnología, que va siempre un paso adelante”.

Manuel y Pedro planean recuperar la inversión en 15 meses. Aunque por el momento están ahorrando lo que minan, en caso de querer cambiar las criptomonedas por dólares lo harán a través de “cuevas” que cambian el dólar a una tasa no oficial y generalmente están escondidas detrás de negocios tradicionales como joyerías.

Lucía, quien solicitó no dar a conocer su nombre completo, comenzó a minar hace cuatro meses y se topó un aumento alarmante en su tarifa eléctrica. A pesar de los subsidios, el saldo triplicó su valor tras comenzar con el minado hogareño, al pasar de US$8 a US$25.

“Cuando llegó la cuenta de luz me preocupé, pero confío en la inversión a largo plazo”, dijo, en diálogo con CoinDesk. Su inversión inicial fue de US$4800. La criptomoneda de su elección fue ether y planea recuperar lo invertido en aproximadamente ocho meses.

Tanto Lucía como Manuel y Pedro temen por el cambio de protocolo de ether y esperan poder recuperar lo invertido antes de que entre en juego ether 2.0.

Un nicho popular

La minería casera de cripto se ha vuelto tan relevante en Argentina que hasta han aparecido influencers en la materia, quienes explican a novatos cómo adquirir maquinaria y realizar la inversión necesaria.

Valeria Frías suma más de 12.000 seguidores en su cuenta de Instagram y recibe consultas a diario. En su tiempo libre ensambla, configura y vende equipos de procesamientos de datos para la minería de criptomonedas.

Frías hizo una inversión inicial de US$20.000 en cuatro equipos y la recuperó en 9 meses minando ether. Aunque continúa minando esa moneda, también es consciente del cambio de protocolo y ya tiene en mente comenzar con el minado de otras monedas como ravencoin, conflux o ethereum classic.

“Tenemos una carga impositiva enorme y uno siempre está buscando una actividad que dé rentabilidad como para poder mantener cierto nivel de vida, ganarle a la inflación o evitar caer bajo el nivel de pobreza”, dijo Frías sobre los impuestos en Argentina.

Entre sus clientes se destacan adultos mayores de 80 años, quienes buscan generar un ingreso extra a la jubilación promedio, cuyo monto mínimo en abril fue de US$153.

Para los jubilados argentinos la minería puede ser una actividad aún más rentable que para el resto de la población, ya que el estado nacional puede subsidiar entre el 60% y 100% de las tarifas eléctricas.

Las jubilaciones bajas no son el único problema en la economía argentina. Según el último informe del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), el 37,3% de la población se encuentra bajo el índice de pobreza.

“Mucha gente se volcó a la minería de criptomonedas porque es como un escape”, Frías concluyó.